00:54. El reencuentro con mis hijas ha sido genial. Habían tenido una celebración en el cole por lo que salían pletóricas. Lo único que ha manchado esos momentos es que al poco rato de salir las niñas me estaba pidiendo algo que le correspondería solicitar a su madre.
Al parecer el próximo viernes se celebra el cumpleaños del hijo de su pareja pero esa tarde, aunque es el turno de su madre, les correspondería estar conmigo. Las niñas, como es lógico, quieren ir a la fiesta de cumpleaños. El caso es que yo he cuadrado turnos de trabajo de 24 horas para el jueves y el sábado. Además, lo hice de estar forma para poder llevar a las niñas a escalada ese viernes. ¿Y ahora?.
En realidad la respuesta es clara, las niñas quieren ir al cumple e irán al cumple pero es su madre la que me lo tendría que pedir. Por otro lado no creo que le guste mi respuesta, o tal vez sí. Teóricamente yo las tendría que dejar el miércoles en el cole y ser ella quien las recogiese, iniciando su turno de esa forma. Ese día es el único que las puedo llevar a escalar, además del viernes, por lo que tendrá que esperar a las 19:00.
Lo que más curioso me parece es que hoy, por la tarde, les correspondería estar con su madre pero no me ha dicho nada. Las niñas ya me habían dicho que sería una semana «dura» ya que ella no podía ni el lunes ni el martes. Entiendo que hoy no lo contempla al no haberme dicho nada, ya veremos como se resuelve todo esto.
Este viernes nosotros hemos ido a escalar. He salido encantado, mi hija mayor no deja de sorprenderme con lo que es capaz de hacer, de verdad que no tengo palabras.
El sábado, ayer por una hora, ha sido un día en familia. Asistimos a un pequeño festival en nuestro municipio; talleres, hinchables, comida, música, el mar,… Casi lo inauguramos a primera hora, luego comida en casa de mi hermana que ya está mucho más restablecida. Nos hemos reunido toda la familia, incluso mi abuela.
Después de comer se ha hecho realidad una promesa pendiente. A mi hija mayor le estoy leyendo los libros de Harry Potter antes de dormir, ya estamos en el cuarto libro. Le había prometido que, una vez terminado el tercero, podría ver la primera película de la saga. Ella, en ese momento, me pidió verla con mi hermana, hoy ha sido el día. Lo ha disfrutado tanto que todavía comentaba cosas de la película después de la cena y, además de ser bastante tarde, ya estaba súper cansada.
Ese día lo finalizamos en los conciertos del festival. Pensaba estar sólo un rato y la única razón fue la petición de las niñas de ir un momento. Al final han sido varias horas, dándolo por finalizado cuando ellas ya no podían más.
He tenido una grata sorpresa, desde la parte superior unos vecinos nos han visto bailando, riendo y jugando. Me han regalado un vídeo y unas fotos que me enviaron por Whatssap en ese mismo momento.
El vídeo estaba acompañado del siguiente texto:
«
Mejor que esto no hay naaa 
«
Lo he visto en la misma zona de conciertos y los hemos saludado en la distancia, al localizarlos en la zona desde la que habían tomado los imágenes.
Ya en casa les he dado las gracias:
— Gracias por el momentazo
— Daba gusto verlos —fue su respuesta.
Este tipo de cosas me emocionan mucho. Tienen la capacidad de tocarme por dentro al hacerme ver que no lo estoy haciendo mal con las niñas. No es que tengas dudas al respecto pero un refuerzo positivo siempre es de agradecer.
Como he indicado nos hemos ido relativamente tarde de los conciertos. Ya su madre había preguntado para contactar y, al enviarle una foto de las niñas disfrutando de los conciertos, me ha indicado que esperaría a que llegásemos a casa. Le había enviado un par de fotos de las niñas en las actividades, como de costumbre sus comentarios me han sobrado. También tenía cierto «temor» de que le diese por aparecer allí con su novio y el hijo de este. Por suerte, si ha sido así, no nos hemos encontrado. No me apetece nada ese encuentro.
Cuando he llegado a casa me he encontrado con Anabel en casa de mis vecinos, habíamos hablado un poco durante el día. En principio nos veremos mañana en las actividades y el concierto matutino de finalización del festival. También irán mis vecinos, será mucho más divertido por el número de niños. Mis hijas ya estaban derrotadas por lo que sólo he podido confirmar lo de mañana y para casa. Me habría gustado compartir un rato pero lo primero es lo primero, así se lo he dicho a ella por Whatssap.
Con las niñas ya muy poco, baño, cena, algún pequeño juego y a dormir. La pequeña ha caído en el sillón mientras le secaba el pelo a la mayor.
Una vez dormidas he podido hablar un poco más con Anabel. Hay algo que me sorprende y no es la primera persona que me lo dice. Les asombra mi forma de afrontar todo esto; «tu fuerza para seguir adelante sin ayuda, por ti sólo y por ser un hombre», fueron las palabras que ella utilizó.
Yo no veo otra forma de hacerlo, otra cosa sería anormal para mi. Le he explicado un poco respecto al camino que estoy decidido a hacer, a lo que estoy cambiando. Ella afirma que será bueno para mi y para mis hijas.
También hemos bromeado un poco sobre mañana, «organizarnos» con los niños, actividades, bailar,… Me lo pone muy fácil y me permite abrirme. Seguro que mañana pasamos un rato agradable y continuamos conociéndonos.
He sido sincero y le he dicho que, en cierta forma, voy con más miedo que vergüenza. Miedo porque me puedan hacer daño, por ser yo quien haga daño y por perjudicar a las niñas. Pero bueno, así voy. En fin, reunión de amigos y a pasarlo bien.
¿Cómo me he sentido yo? Continúo tranquilo y en paz. Mi ex ha estado pero ya en un «¿Qué coño está pensando?», respecto a la organización con las niñas. No me engaño, no quiero saber nada de ella. Las dos veces que ha hablado con las niñas he estado lejos y con música puesta para no escuchar su voz. De los audios a las niñas ya no es tan fácil escapar.
Con Anabel también tranquilo. Me gustaría que hubiese mucho más pero mejor así. Tranquilidad y paso a paso. Ahora pienso que si mañana a mi ex le da por ir al festival puede ser un encuentro de lo más «curioso». Esperemos que no se de.
Me voy a la cama. Buenas noches mis amores. Lo estoy pasando infinitamente bien. Las quiero con locura.
