10:47. Cinco años cumple hoy mi hija pequeña. Primer año que no despierto junto a ella este día. Nada más despertarme le he enviado una felicitación y muchos besitos. Sé que lo han escuchado, puede que solo la madre, todavía no tengo respuesta. Esta tarde recogeré a mis hijas y las tendré durante 4 horas. El miércoles celebraremos su cumpleaños con toda la familia.
Ayer finalmente fui a comer a casa de mis padres. Cuando regresaba a mi casa vi los coches estacionados bajo la casa de los padres de mi ex-pareja, celebraban el cumpleaños de la niña un día antes. Imagino que, en parte, para que el hijo de la pareja de mi ex pudiese asistir al mismo.
Es curioso pero me sentí como si me hubiesen robado mi vida. Sé que no es así, estoy mejor sin ella, pero no fue lo que sentí.
Al llegar a casa unos vecinos tenían una celebración familiar y fui «adoptado» por ellos. Ya llevaban tiempo ofreciéndome unirme a estas reuniones que han ido organizando durante el verano. La verdad es que lo he pasado bien, al menos he estado entretenido. Él conoce bien estos procesos y, aunque no hemos profundizado, ha estado bien el rato.
He hablado con mis hijas y se lo habían pasado muy bien. Me alegré mucho por ellas aunque mis sentimientos estaban enfrentados.
Me he ido tarde a la cama pero he logrado dormir bien. Por la mañana me he despertado antes de que sonase el despertador. He querido permanecer en la cama pero me he sorprendido pensando en mi ex, su pareja,… Me he levantado recriminándome que estuviese pensando en ella y no en mis hijas.
Ya he organizado varias cosas y saldré dentro de un rato para comprar el último detalle a mi hija. Se lo entregaré esta tarde y el resto de regalos serán para el miércoles, junto a los del resto de la familia. Bueno, puede que se los de todos esta tarde, ya veremos.
Nos vemos en un rato mis viditas. Las quiero mis amores.